Mārīcī (en sánscrito: मारीची), traducido literalmente como "Rayo de Luz", es una deidad antigua en la tradición budista y en el hinduismo, asociada con la luz, la guerra y la protección. Esta divinidad, conocida como 摩利支天 en chino (Mólìzhītiān) y como 摩利支 en japonés (Marishiten), desempeña un papel central en el ámbito religioso y cultural de Asia Oriental. Su relevancia es notable en la historia y la evolución de las prácticas marciales japonesas, donde es venerada como una protectora de guerreros y practicantes de artes marciales, tanto en el contexto budista como en el de las artes marciales tradicionales japonesas.
Origen e historia de Mārīcī
Mārīcī tiene sus raíces en la antigua cosmología hindú, donde inicialmente se le representa como una personificación del rayo de sol o de la luz, un símbolo de poder, velocidad y evasión. En el hinduismo, Mārīcī es uno de los grandes sabios o Rishis, y su nombre significa literalmente "rayo de luz", simbolizando un ser de poder espiritual iluminado. Su figura aparece en textos budistas tempranos, como los sutras y los tantras, donde se le asocia con la iluminación y la protección. En el budismo esotérico o Vajrayana, que se desarrolló en la India y se extendió a través de Asia, Mārīcī fue adoptada como una bodhisattva y luego como una deidad protectora que ayuda a los practicantes a superar obstáculos.
Mārīcī en China: La transformación a Mólìzhītiān
Con la expansión del budismo a China, Mārīcī fue introducida en el panteón chino y recibió el nombre 摩利支天 (Mólìzhītiān). Durante las dinastías Sui (581-618) y Tang (618-907), el budismo chino comenzó a asimilar diversas figuras del budismo esotérico indio, y Mārīcī adquirió un rol protector. Se le representaba montando un jabalí (símbolo de valentía y fuerza) o sentada sobre un carro tirado por siete jabalíes. En esta tradición, Mólìzhītiān no solo simbolizaba la luz y la evasión de obstáculos, sino también la invisibilidad y la rapidez, atributos que más tarde resonarían profundamente en los conceptos estratégicos de los guerreros japoneses.
La llegada de Mārīcī a Japón y su adopción en las artes marciales
Mārīcī llegó a Japón a través del budismo esotérico y de la transmisión de sutras y tantras chinos en el período Asuka (538-710), cuando Japón adoptó y reinterpretó varias deidades budistas. En Japón, esta figura se transformó en Marishiten (摩利支天) y ganó especial importancia entre los guerreros samuráis y los practicantes de artes marciales. La influencia de Marishiten en el Japón feudal fue particularmente relevante durante los períodos Kamakura (1185-1333) y Muromachi (1336-1573), épocas en las que la figura del guerrero profesional o "bushi" comenzó a consolidarse.
La deidad fue adoptada como una figura protectora, particularmente venerada en las prácticas esotéricas de los samuráis, quienes le rezaban para obtener invisibilidad y protección en el campo de batalla. La invocación a Marishiten en tiempos de guerra simbolizaba la habilidad de moverse sin ser detectado, una cualidad estratégica clave en el contexto del ninjutsu y otras disciplinas marciales. Los guerreros creían que Marishiten otorgaba una protección especial, ayudándolos a sortear los peligros y garantizando su seguridad en combate.

Marishiten y su iconografía en Japón
En el arte y la iconografía japonesa, Marishiten es representada de varias formas. En algunas imágenes, aparece montada sobre un jabalí, que simboliza su conexión con la velocidad y la fuerza bruta, mientras que en otras es mostrada con múltiples brazos, cada uno sosteniendo diferentes armas y atributos esotéricos, lo que resalta su habilidad para enfrentarse a varios enemigos a la vez. En su forma japonesa, Marishiten a menudo sostiene una espada y un arco, símbolos de la destreza marcial. A veces, sus ojos están semicerrados, lo que representa su naturaleza introspectiva y su conexión con la meditación y la conciencia de uno mismo, habilidades esenciales para los practicantes de artes marciales.
El budismo esotérico japonés, que influenció a sectas como Shingon y Tendai, promovió el uso de Marishiten como un guardián espiritual. En templos japoneses, se encuentran estatuas y mandalas de Marishiten, especialmente en lugares frecuentados por guerreros y artistas marciales, como el monte Hiei, donde se realizaban entrenamientos esotéricos y disciplinas marciales.
La influencia de Marishiten en el Budo y el Ninjutsu
La influencia de Marishiten en las artes marciales japonesas se puede ver en la filosofía del budo y en disciplinas específicas como el ninjutsu. La figura de Marishiten inspira los conceptos de sigilo, evasión y una aguda percepción del entorno. Para el practicante de ninjutsu, la habilidad de moverse sin ser detectado o de "hacerse invisible" es una cualidad esencial, y Marishiten representa esta capacidad en el plano espiritual. Los ninjas y samuráis veneraban a Marishiten, buscando su ayuda para la invisibilidad, agilidad y la rapidez mental, habilidades que les permitían sobrevivir y triunfar en situaciones adversas.
En el budo, la presencia de Marishiten representa una guía espiritual para mantener el enfoque en la disciplina, el autocontrol y el desarrollo de una percepción refinada. La deidad encarna la luz de la sabiduría que disipa las ilusiones del ego, permitiendo que el practicante de artes marciales se enfoque en la verdadera esencia del combate: la superación del propio miedo y la iluminación interior.
La devoción a Marishiten en el Japón moderno
La veneración de Marishiten se ha mantenido viva en Japón hasta la actualidad, especialmente en templos budistas dedicados a esta deidad. En Tokio, el Templo Zenkō-ji y otros santuarios tienen altares para Marishiten, y se llevan a cabo rituales para invocar su protección. Aunque la devoción a Marishiten ha disminuido con la modernización de Japón, aún se realizan festivales y ceremonias en su honor, y muchos artistas marciales continúan venerándola en la actualidad como símbolo de perseverancia, valentía y protección.
En el contexto contemporáneo, Marishiten sigue siendo una inspiración en la práctica del budo y del ninjutsu. Su figura recuerda a los practicantes la importancia de la calma interior y la claridad mental, cualidades esenciales no solo en el combate, sino en todas las facetas de la vida.
Mārīcī, o Marishiten en Japón, representa una profunda intersección entre el budismo esotérico y la cultura marcial. Como protectora de los guerreros, su presencia simboliza no solo la luz que guía, sino también la habilidad de navegar entre las sombras, de enfrentar el combate con una mente clara y un corazón sereno. En el Japón moderno, aunque su culto ha sido desplazado por otras tradiciones, Marishiten sigue siendo venerada en círculos selectos, especialmente entre aquellos que entienden la disciplina marcial como un camino hacia la autocomprensión y la paz interior. Así, la figura de Marishiten trasciende el tiempo y el espacio, continuando su legado como una protectora de la iluminación y el arte del combate.
Templos y santuarios dedicados a Marishiten
En Japón, existen varios templos y santuarios dedicados a Marishiten, especialmente en las regiones donde la veneración de esta deidad ha sido históricamente fuerte entre los samuráis y los practicantes de artes marciales. Algunos de los templos más conocidos son:
1. Zenko-ji (善光寺) – Tokio.
Este templo, ubicado en el distrito de Asakusa, Tokio, es uno de los pocos que tiene un altar dedicado a Marishiten. El templo atrae a practicantes de artes marciales y devotos que buscan protección y buena fortuna. En Zenko-ji, se celebran rituales específicos para invocar la protección de Marishiten.2. Choho-ji (長保寺), también conocido como Marishiten-do – Kioto.
Situado en Kioto, este templo budista es conocido popularmente como Marishiten-do debido a su dedicación a Marishiten. Fue un lugar frecuentado por samuráis que deseaban recibir su protección y desarrollar habilidades marciales como el sigilo y la fortaleza. El templo aún conserva altares y figuras dedicadas a Marishiten.3. Toyokawa Inari (豊川稲荷) - Toyokawa, Prefectura de Aichi.
Aunque Toyokawa Inari es principalmente un templo dedicado a Inari, también cuenta con un santuario de Marishiten, donde se ofrecen plegarias para la protección y el éxito en asuntos relacionados con la guerra y la competencia. Este lugar es frecuentado por practicantes de artes marciales y personas que buscan inspiración en la figura de Marishiten.4. Shinsho-ji (新勝寺) - Narita, Prefectura de Chiba.
Conocido como uno de los templos más antiguos y populares de Japón, Shinsho-ji también alberga altares dedicados a Marishiten. Este templo es importante para el budismo esotérico y atrae a numerosos practicantes de budo que ven en Marishiten una figura de guía y protección.
Estos templos han conservado la tradición de veneración a Marishiten, ofreciendo altares, amuletos y rituales específicos para honrarla. Aunque en el Japón moderno esta devoción no es tan común, su presencia en estos templos muestra la perdurable influencia de Marishiten en la espiritualidad de las artes marciales y el budismo esotérico japonés.


Las estatuas más antiguas de Japón sobre Marishiten
La imagen más antigua de Marishiten en Japón se encuentra en el Choho-ji (長保寺), también conocido como Marishiten-do, en Kioto. Este templo es conocido por ser uno de los primeros lugares en Japón donde se estableció un altar dedicado específicamente a Marishiten, vinculado a las prácticas de protección de los guerreros y la tradición esotérica.
La estatua de Marishiten en Choho-ji, que data del período Heian (794-1185), es considerada una de las más antiguas representaciones de esta deidad en Japón. Representa a Marishiten en una postura majestuosa y protectora, a menudo con atributos como el jabalí y varios brazos sosteniendo símbolos de protección y poder. Esta imagen refleja la transición de Marishiten desde sus orígenes en el budismo esotérico hasta convertirse en una deidad protectora de los samuráis y los practicantes de artes marciales en Japón.
Otra antigua representación notable de Marishiten se encuentra en Zenkō-ji en Tokio, aunque es más reciente en comparación con la de Choho-ji. Estas antiguas imágenes de Marishiten no solo son valoradas como piezas de arte, sino también como símbolos de la profunda conexión espiritual que los guerreros japoneses desarrollaron con esta deidad en busca de protección, fortaleza y sabiduría en el campo de batalla.
Oración e invocación de Marishiten
Para invocar a Marishiten, los practicantes en Japón y en la tradición budista esotérica utilizan una combinación de mantras, mudras (gestos rituales) y oraciones específicas. Estos rituales buscan la protección, invisibilidad, rapidez y claridad mental que simboliza Marishiten. A continuación, se describen algunos elementos comunes en su invocación:
1. Mantra de Marishiten
El mantra es una fórmula sagrada que, al recitarse, establece una conexión espiritual con Marishiten. Un mantra común utilizado para invocar su protección es:
Om Marici svaha (ओं मारीचि स्वाहा)
Este mantra se recita de forma repetitiva, con un enfoque en la intención de invocar la protección y la claridad que otorga Marishiten. En el contexto marcial, se recita para pedir invisibilidad y rapidez en el movimiento, cualidades esenciales en el campo de batalla.
2. Mudra de Marishiten
El mudra utilizado para Marishiten es el Marishi-in (摩利支印), un gesto específico de las manos que representa su energía protectora. El practicante suele colocar las manos frente al pecho, con el dedo índice y el dedo anular levantados mientras el pulgar sostiene los otros dedos en un símbolo de fortaleza y determinación. Este mudra se combina con la recitación del mantra para concentrar y canalizar la energía protectora de Marishiten.
3. Oración e invocación de Marishiten
En templos y prácticas esotéricas, se recitan oraciones específicas para pedir la protección y el favor de Marishiten. Una oración típica podría ser:
摩利支天よ、武士たちの守護者、輝く光の光線よ、私にあなたの力と庇護を授けてください。あなたが象徴する光のように、見えないままに、俊敏で速く動けるようにしてください。私の道において、明晰さと決意を授けてください。
Marishiten yo, bushi-tachi no shugosha, kagayaku hikari no kosen yo, watashi ni anata no chikara to higo o sazukete kudasai. Anata ga shouchou suru hikari no you ni, mienai mama ni, shunbin de hayaku ugokeru you ni shite kudasai. Watashi no michi ni oite, meiseki-sa to ketsui o sazukete kudasai.
"Marishiten, protectora de los guerreros, brillante rayo de luz, concédeme tu fuerza y refugio. Permíteme moverme sin ser visto, ágil y rápido como la luz que tú representas. Concédeme claridad y determinación en mi camino."
Esta oración se recita al inicio del ritual y puede incluirse en la meditación, visualizando a Marishiten como una luz envolvente que protege al practicante.
En las tradiciones esotéricas japonesas y chinas, hay algunos sutras y mantras dedicados a Marishiten, aunque es importante señalar que su invocación tiende a ser más breve y concentrada en mantras que en oraciones extensas, especialmente en el budismo esotérico. Uno de los textos más conocidos relacionados con Marishiten es el Marici Dharani (摩利支天陀羅尼), que es un tipo de invocación sagrada o "dharani" utilizada para pedir su protección y habilidades.
Esta es una de las oraciones breves, tradicionalmente utilizada en su veneración:
摩利支天真言 (Marici Ten Shingon):
On Marishi Sowa Ka (オン・マリシ・ソワカ)
Este mantra, que se traduce aproximadamente como "Oh, Marici, bendíceme," es un llamado directo a Marishiten para recibir su protección y poder. "On" es una sílaba que abre muchos mantras budistas y representa respeto y devoción; "Marishi" es su nombre; y "Sowa Ka" es una frase de cierre que significa algo similar a "que así sea" o "que se cumpla."
En el contexto esotérico japonés, los practicantes pueden acompañar este mantra con visualizaciones y mudras específicos, además de repetirlo en serie, creando una atmósfera espiritual para conectar con Marishiten y recibir su favor.
4. Visualización
Además del mantra, mudra y oración, es común que los practicantes realicen una visualización durante el ritual. Marishiten se imagina como una figura de luz radiante, montando un jabalí o en un carro de siete jabalíes, rodeada de una luz que representa protección y velocidad. El practicante visualiza cómo esta luz envuelve su cuerpo, haciéndolo invisible y protegiéndolo de los peligros.
5. Realización del Ritual
Este ritual puede realizarse tanto en templos como en prácticas individuales. La secuencia completa involucra la recitación repetitiva del mantra, el uso del mudra, la visualización de Marishiten y la oración. Estos pasos ayudan a cultivar la conexión con Marishiten y a obtener su favor para la protección y éxito en las artes marciales o en cualquier situación que requiera claridad y fortaleza espiritual.
En algunos templos, los monjes realizan este ritual de manera especial para los practicantes de artes marciales que buscan la bendición de Marishiten, especialmente en lugares donde la tradición marcial es fuerte, como el templo Chōhō-ji en Kioto.

La devoción de la casta guerrera hacia Marishiten
Existe una tradición documentada de varios guerreros japoneses, especialmente entre los samuráis, que veneraban a Marishiten en busca de protección y cualidades como la invisibilidad y la rapidez en el combate. Uno de los ejemplos más destacados es la figura de Uesugi Kenshin (1530–1578), un famoso daimyō del período Sengoku y uno de los generales más reverenciados de Japón. Uesugi Kenshin era conocido por su profunda devoción al budismo y su conexión con Marishiten, a quien consideraba una protectora espiritual en el campo de batalla.
Uesugi Kenshin y su devoción a Marishiten
Uesugi Kenshin, también llamado "el Dragón de Echigo" por su habilidad marcial y su carácter indomable, era famoso por realizar rituales esotéricos budistas antes de entrar en batalla. Aunque su deidad principal era Bishamonten, el dios budista de la guerra y protector de los guerreros, también se dice que veneraba a Marishiten, en especial para obtener habilidades de invisibilidad y agilidad, fundamentales en la estrategia militar.
Para Kenshin, Marishiten representaba el poder de moverse de manera indetectable y rápida, cualidades cruciales para lanzar ataques sorpresivos y evadir a los enemigos. Los registros de sus estrategias en combate muestran que empleaba tácticas que dependían de la velocidad y el factor sorpresa, atributos que, en el contexto espiritual, se asocian a la influencia de Marishiten.
La influencia de Marishiten en los clanes Ninja
Además de los samuráis, algunos clanes de ninja también estaban influenciados por la devoción a Marishiten. Aunque no hay registros específicos de un ninja individual en particular, los textos sobre ninjutsu y las tradiciones orales de clanes como el clan Iga mencionan la práctica de invocar a Marishiten para mejorar las habilidades de invisibilidad y sigilo. En la filosofía del ninjutsu, el poder de “ser invisible” o moverse sin ser detectado tenía un carácter tanto físico como espiritual, y Marishiten era una de las deidades que personificaba esa capacidad.
Aunque las menciones a Marishiten entre los guerreros y ninja no son tan frecuentes en documentos históricos detallados, su figura era claramente venerada como una fuente de protección y cualidades estratégicas valiosas. En el caso de Uesugi Kenshin, su conexión con Marishiten, combinada con su fe en Bishamonten, muestra cómo los guerreros del período Sengoku buscaban en las deidades budistas una guía espiritual que complementara su destreza en combate.